¿Qué es lo que has venido a hacer aquí?

¿Qué es lo que has venido a hacer aquí?
He venido
a besar tus labios con mis ojos,
a dejar en tu cuerpo mis caricias,
a rezar a un dios estupendo y lleno de vida,
a respirar el aliento mismo de la creación,
pero sobre todo,
por siempre y para siempre,
a amarte, hermano mío,
amarte y no dejarte de amar,
nunca más dejarte de amar.
(Francisco J. Francisco Carrera, "Luna de Agosto")

domingo, 29 de abril de 2012

I BELIEVE IN YOU


Porque un abrazo siempre nos hace conscientes de qué
estamos haciendo aquí...

¿Sabes?  Creo en ti.  Siempre he creído en ti.  Sé que eres mi hermano y te amaré hasta que se me rompa el corazón.  Sé que todavía no nos conocemos, que nunca hemos hablado, que nuestros ojos no saben del dulce amanecer que se conjura en los labios del otro.  Pero acaso por ello te amo con toda mi alma.  Y nunca he dejado de creer en ti.  Porque sé lo que eres en verdad aunque no nos conozcamos. 

Sé que eres la alegría misma de la lluvia que vuelve gozosa a fundirse con el mar.  Sé que eres el viento y las estrellas, la  montaña nevada y el fuego infinito del volcán a punto de estallar.  Y sé que sólo es cuestión de tiempo el que nos encontremos, seguro que de forma casual, paseando de forma indolente por una calle gris repleta de gente asimismo gris porque han olvidado que son la luz que nunca deja de jugar con las sombras más bellas.

Y hoy que siento esta alegre tristeza que me llena de lágrimas, hoy que recurro a la burda melancolía del ayer, hoy que ya no es hoy, ni ayer, ni mañana, hoy que es el no tiempo, el vacío absoluto del invierno de los sueños, hoy, querido mío, hoy te busco tras la ventana y nada hace presagiar que hoy, hoy y hoy sea distinto del ayer.  Pero es distinto... aunque siempre sea lo mismo.

Y yo sigo creyendo en ti.

Creo en ti, no lo olvides.

Y te amo.

Te amo sin conocerte.

Te amo porque siempre te he conocido.

Gracias, amig@s mí@s, por estar ahí!!!!!!

domingo, 22 de abril de 2012

LAS SABIAS PALABRAS DEL JEFE SEATTLE


Como a todo niño, los indios norteamericanos me han fascinado desde que viera las primeras películas del Oeste.  Lo cierto es que a pesar de que la propaganda mediática no escatimaba esfuerzos para que todos nos identificásemos con los del Séptimo de Caballería, a mí los que me molaban eran los indios, tan naturales, tan ecologistas, tan dulcemente salvajes, tan maravillosamente ellos.

Ayer releía al mitólogo Joseph Campbell (su libro el Poder del Mito, en conversación con Moyers, es alucinante) y volvía a degustar las palabras del Jefe Seattle en la carta que le escribió al Gobierno de Estados Unidos.  Me parece una buena manera de empezar este domingo, recordando esa gran lección para todos los humanos, aquí tenéis el texto completo:

El Gran Jefe Blanco de Wáshington ha ordenado hacernos saber que nos quiere comprar las tierras.
 
El Gran Jefe Blanco nos ha enviado también palabras de amistad y de buena voluntad. Mucho apreciamos esta gentileza, porque sabemos que poca falta le hace nuestra amistad. Vamos a considerar su oferta pues sabemos que, de no hacerlo, el hombre blanco podrá venir con sus armas de fuego a tomar nuestras tierras. El Gran Jefe Blanco de Wáshington podrá confiar en la palabra del jefe Seattle con la misma certeza que espera el retorno de las estaciones. Como las estrellas inmutables son mis palabras.

¿Cómo se puede comprar o vender el cielo o el calor de la tierra? Esa es para nosotros una idea extraña.
Si nadie puede poseer la frescura del viento ni el fulgor del agua, ¿cómo es posible que usted se proponga comprarlos?

Cada pedazo de esta tierra es sagrado para mi pueblo. Cada rama brillante de un pino, cada puñado de arena de las playas, la penumbra de la densa selva, cada rayo de luz y el zumbar de los insectos son sagrados en la memoria y vida de mi pueblo. La savia que recorre el cuerpo de los árboles lleva consigo la historia del piel roja.

Los muertos del hombre blanco olvidan su tierra de origen cuando van a caminar entre las estrellas. Nuestros muertos jamás se olvidan de esta bella tierra, pues ella es la madre del hombre piel roja. Somos parte de la tierra y ella es parte de nosotros. Las flores perfumadas son nuestras hermanas; el ciervo, el caballo, el gran águila, son nuestros hermanos. Los picos rocosos, los surcos húmedos de las campiñas, el calor del cuerpo del potro y el hombre, todos pertenecen a la misma familia.

Por esto, cuando el Gran Jefe Blanco en Wáshington manda decir que desea comprar nuestra tierra, pide mucho de nosotros. El Gran Jefe Blanco dice que nos reservará un lugar donde podamos vivir satisfechos. Él será nuestro padre y nosotros seremos sus hijos. Por lo tanto, nosotros vamos a considerar su oferta de comprar nuestra tierra. Pero eso no será fácil. Esta tierra es sagrada para nosotros. Esta agua brillante que se escurre por los riachuelos y corre por los ríos no es apenas agua, sino la sangre de nuestros antepasados. Si les vendemos la tierra, ustedes deberán recordar que ella es sagrada, y deberán enseñar a sus niños que ella es sagrada y que cada reflejo sobre las aguas limpias de los lagos hablan de acontecimientos y recuerdos de la vida de mi pueblo. El murmullo de los ríos es la voz de mis antepasados.

Los ríos son nuestros hermanos, sacian nuestra sed. Los ríos cargan nuestras canoas y alimentan a nuestros niños. Si les vendemos nuestras tierras, ustedes deben recordar y enseñar a sus hijos que los ríos son nuestros hermanos, y los suyos también. Por lo tanto, ustedes deberán dar a los ríos la bondad que le dedicarían a cualquier hermano.

Sabemos que el hombre blanco no comprende nuestras costumbres. Para él una porción de tierra tiene el mismo significado que cualquier otra, pues es un forastero que llega en la noche y extrae de la tierra aquello que necesita. La tierra no es su hermana sino su enemiga, y cuando ya la conquistó, prosigue su camino. Deja atrás las tumbas de sus antepasados y no se preocupa. Roba de la tierra aquello que sería de sus hijos y no le importa.

La sepultura de su padre y los derechos de sus hijos son olvidados. Trata a su madre, a la tierra, a su hermano y al cielo como cosas que puedan ser compradas, saqueadas, vendidas como carneros o adornos coloridos. Su apetito devorará la tierra, dejando atrás solamente un desierto.
Yo no entiendo, nuestras costumbres son diferentes de las suyas. Tal vez sea porque soy un  salvaje y no comprendo.

No hay un lugar quieto en las ciudades del hombre blanco. Ningún lugar donde se pueda oír el florecer de las hojas en la primavera o el batir las alas de un insecto. Mas tal vez sea porque soy un hombre salvaje y no comprendo. El ruido parece solamente insultar los oídos.
¿Qué resta de la vida si un hombre no puede oír el llorar solitario de un ave o el croar nocturno de las ranas alrededor de un lago?. Yo soy un hombre piel roja y no comprendo. El indio prefiere el suave murmullo del viento encrespando la superficie del lago, y el propio viento, limpio por una lluvia diurna o perfumado por los pinos.

El aire es de mucho valor para el hombre piel roja, pues todas las cosas comparten el mismo aire -el animal, el árbol, el hombre- todos comparten el mismo soplo. Parece que el hombre blanco no siente el aire que respira. Como una persona agonizante, es insensible al mal olor. Pero si vendemos nuestra tierra al hombre blanco, él debe recordar que el aire es valioso para nosotros, que el aire comparte su espíritu con la vida que mantiene. El viento que dio a nuestros abuelos su primer respiro, también recibió su último suspiro. Si les vendemos nuestra tierra, ustedes deben mantenerla intacta y sagrada, como un lugar donde hasta el mismo hombre blanco pueda saborear el viento azucarado por las flores de los prados.

Por lo tanto, vamos a meditar sobre la oferta de comprar nuestra tierra. Si decidimos aceptar, impondré una condición: el hombre blanco debe tratar a los animales de esta tierra como a sus hermanos.
Soy un hombre salvaje y no comprendo ninguna otra forma de actuar. Vi un millar de búfalos pudriéndose en la planicie, abandonados por el hombre blanco que los abatió desde un tren al pasar. Yo soy un hombre salvaje y no comprendo cómo es que el caballo humeante de hierro puede ser más importante que el búfalo, que nosotros sacrificamos solamente para sobrevivir.

¿Qué es el hombre sin los animales? Si todos los animales se fuesen, el hombre moriría de una gran soledad de espíritu, pues lo que ocurra con los animales en breve ocurrirá a los hombres. Hay una unión en todo.
Ustedes deben enseñar a sus niños que el suelo bajo sus pies es la ceniza de sus abuelos. Para que respeten la tierra, digan a sus hijos que ella fue enriquecida con las vidas de nuestro pueblo. Enseñen a sus niños lo que enseñamos a los nuestros, que la tierra es nuestra madre. Todo lo que le ocurra a la tierra, le ocurrirá a los hijos de la tierra. Si los hombres escupen en el suelo, están escupiendo en sí mismos.
Esto es lo que sabemos: la tierra no pertenece al hombre; es el hombre el que pertenece a la tierra. Esto es lo que sabemos: todas la cosas están relacionadas como la sangre que une una familia. Hay una unión en todo.

Lo que ocurra con la tierra recaerá sobre los hijos de la tierra. El hombre no tejió el tejido de la vida; él es simplemente uno de sus hilos. Todo lo que hiciere al tejido, lo hará a sí mismo.
Incluso el hombre blanco, cuyo Dios camina y habla como él, de amigo a amigo, no puede estar exento del destino común. Es posible que seamos hermanos, a pesar de todo. Veremos. De una cosa estamos seguros que el hombre blanco llegará a descubrir algún día: nuestro Dios es el mismo Dios.
Ustedes podrán pensar que lo poseen, como desean poseer nuestra tierra; pero no es posible, Él es el Dios del hombre, y su compasión es igual para el hombre piel roja como para el hombre piel blanca.
La tierra es preciosa, y despreciarla es despreciar a su creador. Los blancos también pasarán; tal vez más rápido que todas las otras tribus. Contaminen sus camas y una noche serán sofocados por sus propios desechos.

Cuando nos despojen de esta tierra, ustedes brillarán intensamente iluminados por la fuerza del Dios que los trajo a estas tierras y por alguna razón especial les dio el dominio sobre la tierra y sobre el hombre piel roja.
Este destino es un misterio para nosotros, pues no comprendemos el que los búfalos sean exterminados, los caballos bravíos sean todos domados, los rincones secretos del bosque denso sean impregnados del olor de muchos hombres y la visión de las montañas obstruida por hilos de hablar.

¿Qué ha sucedido con el bosque espeso? Desapareció.

¿Qué ha sucedido con el águila? Desapareció.

La vida ha terminado. Ahora empieza la supervivencia.

Como nosotros somos parte de la tierra, así vosotros sois parte de la tierra también.  Esta tierra es preciosa para nosotros.  Una cosa sabemos: sólo hay un Dios.  Ningún hombre, sea Rojo o Blanco, puede apartarse, permanecer indiferente.  

Después de todo, somos hermanos.



Yo, por mi parte, aporto un poemita al asunto, y con ello me marcho, que tengo un domingo de trabajo.


DESPUÉS DE TODO, SOMOS HERMANOS
por Francisco José Francisco Carrera

Después de todo, somos hermanos.
(Jefe Seattle, carta al Gobierno de Los Estados Unidos en 1852)


Hermano,
ven,
acaricia mi voz
con la luz de tu sonrisa,
que el tacto de cielo
de tus ojos
cure mis heridas
cuando estas
lloren la sangre
eterna
de la vida.

Hermano,
no te ocultes ahora,
necesito saber
que de tus labios
siguen brotando
estrellas silenciosas,
que de tu corazón
mana jubiloso
el fuego eterno que
de la vida.

Hermano,
te amo tanto
que confundo
mi cuerpo con el tuyo,
nada tengo o deseo
si no es tuyo o lo deseas
y cuando siento
que algo oscuro
te aprisiona,
me ilumino sin dudarlo
y te libero.

Hermano,
querido hermano,
hermano mío,
amado hermano,
dejo mi alma
en tus dedos
para siempre
y para siempre
desaparezco
en el abismo blanco
de tus cuerpo,
siendo uno y el mimo
para siempre,
siendo, como la luz,
transparente.


Besos enormes para todos.

domingo, 15 de abril de 2012

DOS FRAGMENTOS DE LUZ

Este domingo apenas tengo nada que decir, esto me pasa a menudo, no os vayáis a creer, me imagino que tiene que ver con esos otros momentos "charlatanes" que me frecuentan.  Disfruto de estos silencios externos e internos para leer poesía y, si puedo, compartirla.  Hoy sólo quiero dejaros un par de poemas para vuestro disfrute.  Nada más.  Besos enormes para tod@s.

El primero es un Rubaiyat del poeta persa Mevlânâ Djelâl-Eddîn-i-Roûmi:

En verdad, tú y yo somos una sola alma,
Aparecemos y nos ocultamos, tú en mí, yo en ti.
El sentido profundo de mi relación contigo es éste:
Entre tú y yo no existe ni el yo ni el tú,
Somos el espejo y el rostro a la vez,
Somos la ebriedad del vino y su copa eterna,
Somos el bálsamo y la sanación,
Somos el agua de juventud y quienes la derraman.

Y, siguiendo en oriente, uno de un occidental pero con máscara zen..., Wayne Liquorman como el encantador Ram Tzu:

Ram Tzu oye decir esto constantemente...


Has tenido una profunda, reveladora,
hondamente conmovedora experiencia espiritual.
Ahora estás enganchado.
Ahora quieres más.
Ahora eres un buscador.


Ningún adicto ha estado nunca
más dedicado,
ni más continuamente decepcionado,
ni se ha sentido más desgraciado.


Antes podías sentirte satisfecho
con un coche nuevo
o con alguien que te quisiera.


Ahora no te conformarás
con menos
que la unión con Dios.


Ram Tzu lo sabe...
Estás jodido.

sábado, 7 de abril de 2012

CHINA BLUE



Me apasiona China, con locura la verdad, nunca he estado allí pero sé que más tarde o más temprano iré, seguro que con Raquel, que es otra sinóloga en potencia.
De China me gusta, sobre todo, su poesía (de la que ya me he ocupado en otro blog y en un posgrado que impartí hace ya algunos años en la uni) y su mitología, la China feudal me encanta, y bueno, a ratos me pongo a leer cosas sobre este país..., y a veces me encuentro con historias que me parten el corazón.  De manera casual llegué a un documental titulado "China Blue" sobre las mujeres trabajadoras chinas en las fábricas de vaqueros.  Y ahí mi mundo espiritual se convirtió en social y así ando, a lágrima viva desde entonces.  Hoy, amig@s mí@s, me duele China en las entrañas y por eso me apetece compartir com vosotr@s dos cosas.  El documental, que lo tenéis completo y subtitulado en Youtube (aunque os advierto que es in-your-face así que si no os apetece tocar el tema "social" mejor dejadlo para otro día), no tiene desperdicio y podéis verlo pinchando AQUÍ.

Y bueno, querid@s mí@s, que os dejo ya hasta el próximo domingo.  Quedo aquí, bien acompañado de la belleza y el dolor de China por igual.

Besos enormes.

domingo, 1 de abril de 2012

PRIMAVERA SORIANA


Siempre hemos sido el Uno jugando a ser los muchos...

Quiero cerrar este domingo la que denominaré la “trilogía” (pues habrán sido 3 entradas, el 3 es mi número mágico) de las prácticas de Educación.  Y voy a cerrar con el aspecto que más me ha conmovido porque quiero que, en la medida de lo posible, el eco de lo que ha  pasado resuene durante muchos más días, meses, años, vidas incluso…

In short, lo que me ha llevado a las lágrimas (de belleza y orgullo y extrema felicidad) es ver con mis ojos y mi corazón (como dice el Principito, lo esencial es invisible para los ojos y sólo se puede ver con el corazón) uno de los actos de solidaridad más profunda que he encontrado en la Universidad a lo largo de los años (y han sido muchos, como profesor y alumno).

Ha sido una modesta representación del grandioso mayo del 68 francés que quiero recordar aquí, acaso porque mi yo francófilo (influido, claro está, por esa hermana maravillosa que tengo que siempre me presentó Francia como un país alucinante, al que a día quiero casi tanto como a Inglaterra o Irlanda, que son mis favoritos).

El mayo del 68 francés vio cómo un grupo de estudiantes de sociología de Nanterre ocupaba la Facultad, más tarde el movimiento se extendía a la Sorbona, centró mítico del conocimiento en Francia.  El gobierno de De Gaulle acabó claudicando más tarde…
Y allí nos dejaron esas perlas ideológicas que recordamos siempre, y que saben mejor en francés:

Il est interdit d’interdire (prohibido prohibir)

L’imagination au povoir (la imaginación al poder)

Hay tantas y tantas, que bueno, entre eso y Baudelaire yo ya tendría “food for thought” para rato…

Somos herman@s, se nos olvida a veces, pero tod@s lo somos.  Incluso aquellos “seres grises” que andan perdidos en el limbo de la vida tocándonos las narices con su aparente mediocridad y deseo de poder.

El único poder es el de la Imaginación y el del Amor.

Somos seres creativos que juegan y se expresan amando y creando (pues al fin y al cabo es la misma cosa), no os engañéis, no sois otra cosa que bellos seres de luz que bailan con las sombras.  Aunque lo olvidamos tan a menudo, nunca hemos sido otra cosa.

Y eso hemos tenido en la uni en Soria.  Imaginación  y Amor.  Una llama que ha integrado a las sombras, las ha aprehendido y las ha hecho suyas.

Y vuelvo a lo que iba… ¿Sabéis qué ha sido lo que me ha emocionado hasta las lágrimas de esta “revolución primaveral Soriana”?  La solidaridad que nos han demostrado los estudiantes, SU COHERENCIA Y AMOR.  Se han querido y se han respetado, a nivel individual y como colectivo.  A pesar de que much@s (la mayoría) de l@s alumn@s tenían un destino cómodo, se han plantado por sus compañeros que tenían destinos más alejados y menos accesibles. 

Esa ha sido SU MAYOR GRANDEZA, ese ha sido SU EJEMPLO, y eso va a permanecer por siempre, porque esos gestos no desaparecen.  Yo al menos lo voy a recordar año tras año, y voy a aplicarme la lección a mí mismo.

¿Creeran ell@s que han luchado solamente por sus derechos?…, no lo sé, pero si es así, que sepáis, querdid@s mí@s, que eso no es del todo cierto, habéis luchado por tod@s.  Es lo que tiene dar un ejemplo, que se da en un momento dado y por una situación particular pero se extrapola a muchos otros órdenes de la vida.

Así que, si estos futuros maestros me han demostrado cuánto me queda por aprender, lo coherente y honesto por mi parte es, primero, darles las gracias y, lo segundo, mirar de frente la realidad y aplicarme el cuento.

Y no voy a decir que lo voy a hacer “a partir de mañana”, lo voy a hacer a partir de ya.

Llevo años girando sobre mí mismo, sobre todo desde que la Uni de mi amor me puso en la encrucijada de “irme perdiendo muchas de las cosas que había atesorado tras 11 años de docencia o quedarme perdiéndome a mí mismo”, como sabéis me fui.  Hice lo que entendí que tenía que hacer del mismo modo en que a día de hoy sigo haciendo lo que entiendo correcto y coherente con mi corazón.  Y lo que acabé encontrando en esos dos años de retiro interior fue algo inesperado, algo que todavía estoy estructurando.  Algo precioso, preciso y preciado.  Acaso por eso soy tan consciente de la importancia del gesto que todos hemos visto, al menos para mí ha sido claro.

ESTAMOS ANTE UN CAMBIO DE PARADIGMA.

Y yo ahora mismo estoy dando saltos como loco de alegría, algo que, como sabe toda la gente que quiero, hago muy a menudo.

Los políticos pensaban que los estudiantes se iban a regir por la ley del “mínimo esfuerzo” como pensando: “como la mayoría no está tan mal, ya verás como el grupo se calla, es a lo que está acostumbrada la sociedad así que a esperar…, que seguro que se cansarán”.  Es lo que hemos hecho todos (yo el primero) tantas veces, callar, mirar para otro lado, como si no fuera con nosotros…

Y ZACA, en todos los morros, los estudiantes se miran, se reconocen y se dicen, “tí@, yo estoy mejor que tú, pero es que yo soy tú, y como te aprecio, COMO TE QUIERO, y no quiero que tú sufras, yo me planto contigo, y si nos quitan todo, nos lo quitan a los dos”.

Ahí es nada…

Ha llegado el momento.  Siempre fue ahora.  Siempre ha sido ahora.  Pero sólo ahora es ahora.  Y es AHORA.

Nada más, que el espíritu de esta revuelta permanecerá como todo gesto VALIENTE Y SOLIDARIO.  Yo, a partir del domingo que viene, recogeré de nuevo otros temas alejados del ámbito universitario (que no me suelo ocupar de la uni en este blog, la verdad), de otros mundos, de otros sueños, pero al menos en esta primera Luna de Agosto de abril quiero aportar una última caricia a esta “primavera Soriana” que nos han regalado nuestr@s estudiantes, y ya que, como sabéis, lo mío es, por vocación y firme decisión, la POESÍA, me despido con un poema.  Así que vengan esos versos compuestos para la ocasión…

PRIMAVERA SORIANA
por Francisco José Francisco Carrera
porque creer es crear,
y porque somos los artífices de la magia en el mundo,
 demiurgos inocentes que no paran de jugar.

Resplandecía su luz
entre las sombras.

Era un corazón
que venía del invierno
pero a cada latido
el verde de la vida
palpitaba más y más.

Ellos fueron uno
a la vez que un mundo
oculto y olvidado
renacía.

Esta vez era cierto,
desde la orilla del miedo
alas blancas de fuego
cubrieron el cielo
con una dulce violencia.

Todos los miramos
sorprendidos,
sabiendo que
junto a ellos
también nosotros
estábamos cambiando.

Sabiendo
que todo iba a ser distinto
por fin,
que el momento
había llegado
de dejar atrás
el odio y la desidia
y que ahora,
sí, AHORA,
el Amor abrazaría con firmeza
el dolor y la tristeza
prendiendo en llamas
para siempre
un mundo viejo y decadente…

..y de las cenizas silenciosas,
como niños que despiertan
al mundo una mañana de agosto,
nos reconoceremos por fin
dejando atrás todas las máscaras,
y con la dulzura de recordar
quiénes somos en verdad
empezaremos todo de nuevo
acaso para volver a olvidar,
pues es un juego...

Pero aunque el olvido
regrese, herman@ mí@,
esta vez,
os lo prometo,
seremos conscientes para siempre
de que hemos venido aquí
para una cosa,
que tenemos un destino,
estamos aquí
para Crear
en un juego de formas
sin final
porque esa es la única
manera
de descubrir
qué es Amar,

qué es Amar
de verdad.

Gracias, herman@s co-creadores del nuevo mundo, qué privilegio, digo de nuevo, saber que juntos creamos y creemos, que juntos las sombras se empiezan a iluminar y lejos de alejarse se hacen un hueco en el  nuevo orden luminoso y se disponen a disfrutar….

Besos enormes!!!!!