Todos
los cursos intento experimentar cosas nuevas con las asignaturas que
imparto. Últimamente lo que más me
interesa cambiar es la Evaluación, acaso por eso este año he decidido hace algo
que llevaba barruntando varios meses.
Cada vez soy más de la opinión de que la Evaluación más justa ha de ser
hecha a partes iguales por el alumno y el profesor, así que dividir la nota
final en un 50-50, la mitad puesta por el docente y la otra mitad por el
discente sería un gran avance. Acaso
todavía no me atrevo a eso, puede que el año que viene, quién sabe (para
empezar, tendría que seguir dando clase), pero este curso he decidido que un 25
% de la nota de mis asignaturas en la uni la van a poner los alumnos y la voy
a respetar aunque no esté de acuerdo.

Para
empezar, tengo que dejar claro que me fío de todos y cada uno de mis alumnos, siempre lo he hecho. En 15 años de docencia creo que no me he
encontrando con más de dos o tres alumnos de los que consideraríamos como jetas
(y si lo fueron, algún motivo tendrían, así que acaso soy yo el que tendría que haber visto por qué era así e intentar solucionarlo). Por
tanto, cómo no voy a respetar la autoevaluación de unas personas intelectualmente
capaces y sobre todo humanamente morales y profundamente éticas.
Esto
es un inicio hacia otro lugar, entendedme, CONSIDERO QUE EL SISTEMA DE EVALUACIÓN ACTUAL ESTÁ OBSOLETO,
las notas FOMENTAN LA COMPETITIVIDAD así que a ver luego cómo transmitimos
COOPERACIÓN, AMOR, IGUALDAD DE BASE.

Las
notas definen, fijan, cristalizan de una manera brutal las imágenes que tenemos de nosotros mismos. PERO NO DEBEMOS OLVIDAR QUE UN ALUMNO NO ES LA NOTA QUE OBTIENE, pero
tendemos a darle tanta importancia a esas estupideces que es muy difícil no
identificarnos con ellas. Pasa lo mismo
con el trabajo, o la nacionalidad, o el género…
Que si soy abogado, español y además (muy) hombre, menuda broma, oye. Eres un ser humano, simple y llanamente eso,
y eso te iguala maravillosamente a todos los demás y eres un ser vivo, lo que te
une a los animales, a las plantas, a las rocas, AL MISMO PLANETA.
Coño, despierta y mira, despierta y mira más
allá de tu peludo ombligo (el mío, al menos, es peludo, vosotros poned el
adjetivo que os venga en gana) y la luz de alrededor te va a dejar enamorado de la vida como te ocurría cuando eras niño o niña.
Y
bueno, si habéis llegado hasta aquí, me gustaría saber vuestra opinión sobre
cómo evaluar, el qué, lo que queráis. Ya sabéis, en el blog, en mi e-mail, por facebook o tomando un café (vale, sí,
pago yo, al menos el primero, que así tendremos que tomarnos otro juntos), ME INTERESAN MUCHÍSMO VUESTRAS OPINIONES!!!!!!
UN BESAZO ENORMES PARA TOD@S!!!!!!!!!